La emocionante visita que realizó el grupo de preescolar a la granja educativa fue una experiencia inolvidable para todos los pequeños exploradores. Desde el momento en que llegaron, los niños se sumergieron en un mundo de descubrimiento y aprendizaje en medio de la naturaleza. Con ojos llenos de asombro, observaron alegremente a los animales de la granja, acariciaron conejitos suaves y alimentaron a las amistosas cabras. Los niños también tuvieron la oportunidad de aprender sobre la importancia de la agricultura sostenible, plantando semillas en el huerto y participando en actividades prácticas que fomentaron su conexión con la tierra y la alimentación saludable.